Cuando come caramelos
el perrito de la casa,
hace gestos tan bonitos,
¡quién sabe lo que le pasa!
Tiene dulzura en los ojos
y en la cola un lunar;
con los pollitos del barrio
¡cómo le gusta jugar!
La niña del cachorrito,
con ternura me decía:
si perdiera mi perrito
¡quizás me enloquecería!
De Cerca del corazón de los niños, 1951
Manuel de Jesús Márquez, escritor salvadoreño
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